Estamos en busca del rejuvenecimiento,
pero ¿cuál es el plan?

Vesículas extracelulares pequeñas jóvenes

son pequeños paquetes con menos de 200 nanómetros expelidos por las células, que cargan distintos tipos de señalizadores por la sangre hacia todo el cuerpo, como ADN, ARN, proteínas y lípidios.

Estudios recientes mostraron que vesículas extracelulares pequeñas extraídas de animales jóvenes, cuando se inyectaron en animales viejos, prolongaron el tiempo de vida de los animales, mejoraron el metabolismo energético mitocondrial, mitigaron los fenotipos senescentes y amenizaron el declinio funcional asociado con el envejecimiento de diversos tejidos, incluyendo el hipocampo, los músculos, el corazón, los testículos y los huesos. De esta forma, nuestro plan consiste en probar la hipótesis de que entre las vesículas extracelulares pequeñas estén los señalizadores de edad, de modo que entre las vesículas extracelulares pequeñas jóvenes estén los señalizadores de edad joven.

Entre todas las estrategias analizadas por el ICR, las vesículas extracelulares pequeñas jóvenes son la que consideramos más prometedora. La lógica de esta terapia tiene como base la teoría científica de que el envejecimiento está controlado por señalizadores de edad, que en los mamíferos, por ejemplo, serían transportados y distribuidos a las células por la corriente sanguínea. De esta forma, el ICR ya está realizando experimentos para verificar si resultados publicados por otros científicos pueden ser reproducidos.

El ICR tiene actualmente el objetivo de reproducir el experimento seminal realizado por Harold Katcher y publicado en el periódico científico Geroscience, en que los investigadores extrajeron vesículas extracelulares pequeñas de la sangre de chanchos jóvenes y las inyectaron en ratones Sprague-Dawley viejos, informando que consiguieron rejuvenecer a los animales según una serie de parámetros, incluyendo memoria, fuerza de agarre, marcadores sanguíneos, células senescentes, entre otros.

Y los primeros pasos ya fueron dados: recientemente concluimos la primera fase de la reproducción del experimento de Harold Katcher. En alianza con Unicamp (Universidad de Campinas — Brasil), el ICR aisló las partículas extracelulares de la sangre de un chancho joven (PPEPs, en la sigla en inglés) y las inyectó en 3 ratones Sprague-Dawley jóvenes con el objetivo de investigar posibles efeitos inmunológicos negativos o tóxicos, usando otros 3 animales como control. Y el resultado fue alentador: no observamos señales de toxicidad o inmunogenicidad agudas en los animales tratados. Haga clic aqui para ver el artículo científico relativo a este experimento.

Además de las provenientes de animales jóvenes, las vesículas extracelulares pequeñas provenientes de otras fuentes jóvenes, como células madre jóvenes, células neonatales y líquido amniótico, también mostraron efectos reparadores y rejuvenecedores en diversos estudios científicos.

El ICR también estudia estas otras fuentes de vesículas extracelulares pequeñas jóvenes, incluso con la posibilidad de descubrir cuáles son las biomoléculas señalizadoras de edad dentro de las vesículas extracelulares pequeñas jóvenes que puedan entonces ser sintetizadas en laboratorio, sin la necesidad de que sean extraídas de fuentes animales.

Ayúdenos a revertir el envejecimiento y evitar las enfermedades de la vejez.